Salen unas magdalenas de exposición con «copete», debemos seguir los «trucos» y saldrán unas magdalenas ricas y «atractivas».
Esta receta de magdalenas me gusta porque pasados dos días, siguen jugosas y esponjosas.
Trucos imprescindibles:
* Cuida de que el bol en el que vayas a hacerlas no esté frío.
* Deja que la masa se enfríe en el frigo 30 minutos antes de meterlas en el horno.
* Espolvorea el azúcar justo antes de meterlas en el horno.
* Mete las magdalenas, con el molde de papel, dentro de unos moldes para “muffins” aptos para el horno, o dentro de flaneras individuales o ponle más de un molde de papel para que no se desparramen.
* El horno debe estar muy caliente y bajar la temperatura cuando las metas.
Ingredientes: (Salen en moldes grandes unas 16 unidades)
* 1 pellizco de sal.
* 1 Cucharada de poste de agua de azahar, se puede prescindir de ella, pero me parece que le da un toque distinto. De hecho me gusta echarlo en los bizcochos, en el roscón de reyes…..
* 1 cucharada colmada de cacao si las queréis de chocolate.
* Pepitas de chocolate a gusto, para una tercera opción.
* 4 huevos medianos.
* 50 gr de zumo de naranja.
* Ralladura de una naranja.
* 200 gr de azúcar.
* 200 gr de aceite de oliva suave.
* 220 gr de harina de repostería.
* 1 sobre de levadura Royal.
Preparación:
Poner agua caliente en un bol grande para que no esté frío, cuando este templado quitar el agua y secarlo. Echar en el los huevos, el azúcar y el zumo de la naranja. Batir todo con una máquina de varillas durante 6 minutos. Verter el aceite en esta masa y seguir batiendo de 8 a 10 minutos.
Agregar la harina tamizada con un colador junto con la levadura, la ralladura de naranja y la sal. Mezclar lo justo con las varillas.
Si queréis las magdalenas de distintos tipos: de chocolate, con pepitas de chocolate… Entonces separar la masa en tres partes. 1/3 para las magdalenas normales, otro 1/3 para las de chocolate, a las que debéis añadir a la masa la cucharada de cacao y el último 1/3 para las de las pepitas donde echaréis la cantidad a vuestro gusto.
Verter la masa en los moldes de las magdalenas hasta que quede un dedo del borde y dejarlos reposar en el frigorífico durante ½ hora.
Precalentar el horno a 230ºC, calor arriba y abajo. Antes de hornear espolvorear las magdalenas con azúcar.
Meterlas en el horno y bajar la temperatura hasta 220ºC, hornear durante 12-14 minutos, altura media. Vigilar el horno para que no se quemen pero sin abrirlo. De todas formas, cada horno es un mundo.
Si seguís los trucos, no dudéis ni por un momento: Os saldrán unas magdalenas de exposición, como las de la foto, con copete.
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